Soldado turdetano |
La leyenda de Baucio Caropo (II)
Queda dicho que la fuente principal del relato sobre Baucio
Caropo que nos ofrece el Vicario Martínez en su Historia de la ciudad de Medina Sidonia (destiérrese el “Barucio” que se deslizó en la edición de 1875) es la obra de Pedro
de Medina Libro de grandezas y cosas memorables de España, publicado en Sevilla por Dominico de Robertis en 1548
(manejamos la edición complutense de 1566 a cargo de Pedro de Robles y Juan de
Villanueva). Efectivamente, después de referirse este cronista a la fundación
de Medina Sidonia por los fenicios y a su ocupación posterior por los
“andaluces” (los turdetanos) pasa a narrar las disputas que estos últimos tuvieron con los cartagineses
que, llegados a Cádiz, pretendían hacerse dueños de las tierras comarcanas del
interior. Escribe Pedro de Medina (mantenemos la grafía y puntuación
originales):
Desta ciudad dizen las coronicas, que viniendo a Cadiz cierta flota de Cartagineses, y auiendo hecho algunos saltos y robos en los Andaluzes Turdetanos. Primero por la costa de la mar: y despues algo mas adentro por la comarca de la tierra començaron algunos pueblos a se bastecer contra sus dañadores. Particularmente los vezinos de la ciudad de Sidon: los quales con mucho mas poder y mayor diligencia que ninguno de los otros pueblos se pusieron a punto, no solo para resistir los enemigos sino tambien para los ofender y acaudillaron las gentes comarcanas: señalando por capitanes y quadrilleros personas que tuviessen cargo del negocio. Entre los quales se escriue auer sido principal capitan y caudillo sobre todos vn varon llamado Baucio Caropo, segun lo nombra don Sebastian electo de Salamanca en el prologo de sus historias, Bocio Capeto natural de aquesta ciudad de Sidon. Varon de crecida estatura: dotado de grandes fuerças y esfuerço: pero no menos virtud y prudencia: tanto que ya de muchos años antes juzgaua la gente de su ciudad y lo mas de todas sus comarcas en los pleytos y debates que les sucedian con otros siete varones semejantes a el en bondad y discrecion, a quien este Baucio tenia señalados para compañeros de su cargo muy entendidos y sabios, en geometria, leyes y philosophia natural: las quales leyes fueron antiquissimas. Estas leyes aprendian de cabeça los varones nobles y principales desta gente: para que teniendo las en la memoria supiessen gouernar a si, y a los otros. Siendo pues tal este Baucio Caropo: sabido que los Cartagineses y todos los de Cadiz eran ya passados en el Andaluzia: donde repartidos por la tierra. En la primera llegada quemaron ciertas caserias y tomauan ganados: y prendian y matauan los hombres quantos hallauan a la mano. Supo este capitan a la parte donde discurrian ciertas vanderas Africanas que hazian lo mas deste daño, las quales tuuo noticia que corrian el campo mas delanteras que las otras y se recogian en vna palizada que tenian cercada de cauas: y bien fortalecida con vn capitan cartagines muy diligente y astuto llamado Mezerbal, o segun otros escriuen Maharbal que procuraua de sostener aquella guerra mas que nadie. Luego como de todo fue certificado Bocio Capeto. Venida la noche salio de su ciudad con el numero de gente que le parecio, y llegados a las estancias de los Cartagineses acometieron por todas partes tan animosamente, que saltando los fosos y cauas entraron a lo fuerte de la palizada, donde se començo la matança mucho cruel y sangrienta con tanta presteza que casi ninguno de los contrarios pudo librarse de muerte o prision, sino fueron Maharbal el capitan. y muy pocos otros, que viendose perdidos tomaron cauallos y desamparada su gente se procuraron poner en saluo siendo heridos y maltratados primero que de la palizada saliessen. Con esta vitoria los Turdetanos y su capitan tornaron a la ciudad y lleuaron los presos: y grandes despojos que allí ganaron. Con mas algunas manos diestras que cortaron a los principales de los muertos, las quales colgaron por memoria segun lo tenian en costumbre por señal de sus vitorias. Aquello fenecido porque su gente gustasse mas de la prosperidad y los enemigos cobrassen doblado pauor. El dia siguiente Baucio Caropo vino con su gente a la ribera abaxo del rio que dezimos ahora Guadalete, caminando contra la mar, y como supo que los Cartagineses tenian alli ciertos nauios con mantenimientos: acometiolos de subito con gran ferocidad, y tomados a prission los que los defendian: les puso fuego quemando los todos con quanto dentro tenian: esto dio muy gran temor en los contrarios. Este capitan pasados pocos días murió: y fue sepultado magnificamente poniendole por el contorno del monumento tantas piedras enhiestas: quantos adversarios le vieron matar en las guerras y batallas en que se hallo, en quanto fue biuo porque tal costumbre tenian las gentes Españolas de su tiempo y aun muchos tiempos mas adelante: y assi parecen oy en esta ciudad muy grandes antiguedades en marmoles muchos y piedras muy grandes blancas y muy hermosas que en la mesma ciudad se han hallado y hallan contino. Especialmente dos piedras que estan en la yglesia principal desta ciudad que son de las hermosas piedras antiguas que hasta oy se ayan hallado en España.
Las imágenes de las indumentarias militares están tomadas de http://miniaturasmilitaresalfonscanovas.blogspot.com.es/2012/04/la-indumentaria-en-la-historia-de.html |